2011 julio

La Atlántida (XXIX)

Dado que el día anterior había escrito una columna sobre las dos posibilidades de derruir la memoria, bien con el silencio bien con la conmemoración obsesiva de los hechos quise ver la modalidad de Casas Viejas en vivo y en

La Atlántida (XXVIII)

Las memorias de Hitchens. Desiguales. Uno puede organizar una monumental fiesta de memoria y literatura con los amigos. Pero el lector interesado ha de tener su tarjeta de cartón.

De vez en cuando ejemplos portentosos, como este párrafo, que, hablando

Santayana, mejorado

Desde los fastos del 50 aniversario, la guerra civil y proximidades se han convertido en un objeto permanente de conmemoración mediática. Como hay, sobre todo, tres fechas implicadas, 1931, 1936 y 1939, los aniversarios se multiplican con cadencia y apretura

La Atlántida (XXVII)

Como adoro las relaciones superficiales estoy en mi elemento cuando viajo. Se conoce mundo y gente hasta mucho antes de que empiecen, uno y otro, a volverse desagradables. Desde este punto de vista ayer tuve un gran día. Por la

La Atlántida (XXVI)

No creo que haya nada en España como la sierra de Huelva. La razón es el uso. En miles y miles de hectáreas no hay un solo metro sin uso. Es cierto que se trata de un uso latifundista, de

La Atlántida (XXV)

Yo escribo por dinero. Pero, a veces, hay propina.

Querido Arcadi,

¡La cantidad de cosas que hay que aprender en la vida! También para mí que el nombre que mejor le cuadraba a ese descomunal instrumento, cuya bruñida campana de

La Atlántida (XXIV)

Una de mis twins, qué hacemos con la ropa, preguntó: «¿Y uno hace doscientos cincuenta kilómetros para comer jamón?» Pobres niñas. Algo empiezan a comprender cuando les revienta a chorros por la comisura el único San Jacobo que habrán comido

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